El colgante de madera que ves en la foto de arriba es de reciente creación. Pertenecen al modelo Esmirna que, a su vez, inaugura una nueva colección llamada Steno. ¿Quieres saber más sobre la composición de los colgantes y por qué he elegido esos nombres para identificarlas? ¡Sigue leyendo!

 

Composición de los colgantes

Los colgantes Esmirna están compuestos por dos partes bien diferenciadas. En la parte superior se utiliza una pieza longitudinal muy vistosa formada de varias capas de madera de nogal, pino y ébano. En la inferior una pieza semicircular más grande de madera de roble sobre la que se realiza el tallado

Para ensamblar la pieza se utilizan fornituras de plata de ley y un cordón de algodón orgánico con certificado OEKO-TEX (garantiza que no contiene sustancias nocivas para la salud).
 

Elección de los nombres

 

Modelo Esmirna

Esmirna es una ciudad del Mediterráneo Oriental conocida como «La perla del Egeo». En sus 3.000 años de historia han pasado los antiguos griegos, hititas, eolios, jonios, persas, lidios, el Imperio de Alejandro Magno, seléucidas, el Imperio Romano, el Bizantino y un largo etcétera de civilizaciones. A modo de alegoría, en esta metrópoli se “fundieron” distintos pueblos a lo largo del tiempo al igual que en los colgantes Esmirna se “fusionan” distintas maderas para enriquecer la composición final.

Colección Steno

Nicolás Steno fue un polímata (con conocimientos de distintas disciplinas científicas y humanísticas) danés que acuñó el término estrato geológico (la superposición de distintas capas de sedimentos una sobre la otra). Como la pieza longitudinal de los colgantes que combina distintas maderas recuerda mucho a los estratos, la colección la he decidido llamar Steno. Como puedes imaginar las futuras piezas Samu-Do que pertenezcan a esta colección van a estar creadas con diversas maderas.

 

Simbología de los colgantes

La madera semicircular de los colgantes Esmirna va a ser la que muestre la simbología. Los dos primeros colgantes simbolizan el Ave Fénix y el Arco Iris Lunar.
 

Colgante Esmirna (Ave Fénix)

Quién no conoce la mítica ave que cada 500 años muere por combustión y de sus cenizas renace de nuevo para iniciar un nuevo ciclo. A nosotros nos ha llegado con el nombre de Ave Fénix, aunque en la civilización egipcia, donde tuvo su origen, se la conocía como Bennu. Allí ya se la vinculó con las crecidas del río Nilo y al ciclo del Sol (ocaso-muerte y orto-resurrección). Más tarde pasó a la mitología grecorromana y a otras tradiciones hasta llegar a nuestros días con la expresión “resurgir como el Ave Fénix”, una alegoría de la resiliencia.

Colgante compuesto por una pieza en la parte superior hecha con madera de nogal, pino y ébano formando distintas capas. Esta pieza tiene forma de prisma con caras rectangulares y está puesta en posición horizontal. De esta pieza cuelga una pieza plana semicírcular de madera de roble tallada con un Ave Fénix. El cordón es de algodón orgánico y las fornituras de plata de ley.

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Colgante Esmirna (Arco Iris Lunar)

Todos conocemos qué es el Arco Iris y cómo se produce. Pero ¿sabías que no todos se generan durante el día? Este es el caso del Arco Iris lunar. Para que este fenómeno se de durante la noche deben cumplirse tres condiciones:

  • Alta humedad en el ambiente (lluvia, niebla o en grandes cataratas).
  • Que haya luna llena.
  • Que la luz emitida por la luna incida de forma directa sobre la niebla. Normalmente esto se produce en el crepúsculo (antes de la salida y después de la puesta del sol) cuando la luna está más baja.

Colgante formado por dos piezas de madera. La primera en la parte superior, tiene forma de prisma con caras rectangulares y está colocada en posición horizontal. Esta pieza está hecha de nogal, pino y ébano formando distintas capas. De la primera pieza cuelga otra de madera de roble, plana y semicírcular. En ella se ha tallado una Arco Iris Lunar. El cordón utilizado es de algodón orgánico y las fornituras de plata de ley.

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